La crisis económica golpeó duro a España y el turismo no estuvo ajeno al impacto: durante los años 2008 y 2009 las visitas de turistas extranjeros a ese país disminuyeron por la aparición de otros lugares novedosos y diferentes como Croacia o países del norte de África. Algunos ajustes y el renovado interés de extranjeros y de los propios españoles por recorrer su país a partir del 2012, demostró el impacto del sector sobre la economía nacional, pero aún así no evitó el fuerte desempleo en el sector.
Según datos oficiales del gobierno español, la mayoría del turismo interno de España se realiza los fines de semana, mientras que los turistas extranjeros llegan al país principalmente a las playas, permaneciendo entre 8 y 15 días donde consumen en restaurantes y ocupan los alojamientos disponibles. Por ello es que la estrategia “turismo de sol y playa” se ha transformado en un ejemplo que a futuro quieren replicar en torno a al turismo cultural.
Para sensibilizar a turistas internos y extranjeros, el Banco Popular viralizó por redes sociales una interesante Infografía que muestra el impacto del turismo en la economía de España, donde se puede observar que la tecnología es el elemento favorito en reservas de viajes, hoteles y otros servicios. Esto se suma al aporte del turismo sostenible para España